MIEDO de STEFAN ZWEIG

TÍTULO:    MIEDO
AUTOR:     STEFAN ZWEIG
GÉNERO:  NOVELA CONTEMPORÁNEA
EDITORIAL: ACANTILADO
TRADUCCIÓN: ROBERTO BRAVO DE LA VARGA
PÁGINAS: 144

SINOPSIS:

Irene Wagner lleva una vida acomodada y sin preocupaciones junto a su marido y sus dos hijos. Sin embargo, tras ocho años de matrimonio, los bailes, el teatro, la ópera y otras actividades sociales se le antojan predecibles y anodinas. Así, más por fantasía novelesca que por autentico deseo, inicia una relación con un joven pianista. 

Pero pronto una mujer la descubre cuando sale del apartamento de su amante e Irene se ve obligada a ceder a un terrible chantaje. El terror de ser descubierta por su marido y de perder todo lo que posee y, ahora descubre, tanto necesita y ama, la sumirá en una tormentosa pesadilla. Escrita en 1913 y publicada por primera vez casi una década más tarde, Miedo es una de las nouvelles más sobrecogedoras de Stefan Zweig, con un final tan sorprendente para la protagonista como para el lector.

Mi opinión

¡Hola, mis queridos amigos!😃💙 ¿Cómo les va el día de hoy? 🌞🌷Espero muy bien. Yo por aquí, trayéndoles una nueva reseña de un libro que encontré en el blog de Rosa Berros: Cuéntame una historia y es que después de leer tan buena reseña, no paré hasta encontrar el libro.

Esta era la primera vez que leía una obra del autor, por lo que no conocía su estilo y tampoco sabía qué esperar de esta lectura, pero mientras iba leyendo fui descubriendo a un escritor con un estilo impecable que me ha sorprendido para bien y espero leer más obras suyas. Así que, sin más ni más, vamos a la reseña.😀

Irene Wagner es una mujer de la alta sociedad, acostumbrada a llevar una vida acomodada y llena de lujos. Casada con uno de los mejores abogados de la capital y con dos hijos, Irene vive cómodamente y sin preocupaciones.

Pero a pesar de tener una vida feliz, la rutina y las ansias de aventura, hicieron que Irene se involucre con un joven pianista llamado Eduard, a quien conoció en una velada.

“Nada en ella, ni el ardor de la sangre, apaciguado por una feliz vida conyugal, ni la necesidad tan común en las mujeres de buscar satisfacción para sus intereses espirituales, la había impulsado a buscarse un amante, era absolutamente feliz al lado de su esposo, un hombre acaudalado, superior a ella en el plano intelectual, con dos hijos, sin ninguna preocupación, satisfecha de poder disfrutar de una vida acomodada, plenamente burguesa, apacible y sin sobresaltos”.

Ella jamás imaginó que después de mantener una conversación casual, la llevaría a mantener una relación con él.

Es así como Irene se encontraba con su amante regularmente, sin interferir con sus ocupaciones diarias, era como si tener un amante, encajara perfectamente en su vida.

“Sin embargo, en ocasiones, un ambiente agradable y relajado excita la sensualidad más que el bochorno o la tormenta, una existencia dichosa y equilibrada puede ser un acicate más eficaz que la desdicha y, para muchas mujeres, la falta de deseo resulta tan fatídica como la insatisfacción o la desesperanza”.

Pero un día, después de salir de la casa de su amante, una mujer de aspecto vulgar se cruzó en su camino, cortándole el paso, el miedo rápidamente se apoderó de ella. La mujer no paraba de reprocharle que ella era la causante de que Eduard, su novio, ya no tenía tiempo para ella.

Y aunque Doña Irene lo negó totalmente y trató de alejarse, la mujer con aire burlón seguía gritando que ella le estaba quitando el novio.  Sin duda, quería chantajearla, por lo que, en su desesperación, sacó un par de billetes y se los entregó a la mujer, con el afán de quitársela de encima y que no siguiera gritando. Mientras la mujer cogía el dinero, le dijo que era una sinvergüenza, algo que ofuscó aún más a Irene.

Una mezcla de culpa, miedo y ansiedad recorrió todo su cuerpo, mientras iba en el taxi trató de calmarse, pero ese encuentro la había afectado más de lo que ella se imaginaba y puso en perspectiva esa relación.

“El miedo había actuado sobre su vida como un ácido corrosivo, descomponiéndola, disgregando sus elementos”.

Apenas llegó a casa, trató de disimular, pues su marido, su hijo pequeño y su hija menor, la esperaban. El solo llegar a su hogar, le daba seguridad, lo que hizo que poco a poco, se fuera calmando, pero al verlos, un sentimiento de vergüenza se apoderó de ella.

“Entonces levantaba la mirada y volvía a sentirse segura. Reparaba en cualquiera de las cosas que la rodeaban, en su cercanía embriagadora, todo lo que contenía aquella habitación ocupaba su sitio, estaba asociado con un recuerdo y tenía un significado. Pensar en ello aliviaba su inquietud”.

Fue desde ese momento, que la vida cómoda y perfecta de Irene daría un giro. El miedo se convirtió en su fiel compañero, miedo a encontrarse nuevamente con esa mujer y ser chantajeada, miedo a ser descubierta, miedo a perderlo todo.

Después de ese espantoso encuentro, Irene se sentía mareada, con ira y muy afectada, tanto así que no quería salir de casa.

“Durante un segundo, el frio recorrió todo su cuerpo, luego, de repente, sintió una extraña efervescencia que iba creciendo e inundando su ser, las ganas de vivir, el placer de salir al mundo, de andar con paso ligero, firme y ágil, con fuerza, con decisión, una forma de caminar en la que apenas se reconocía a sí misma”.

La vida de Irene no volvería a ser la misma, una vida en la que el miedo y la vergüenza la atormentaban constantemente.

SED DE AVENTURAS…INFIDELIDAD… TRAICIÓN

Contada por un narrador omnisciente, el libro nos muestra a una mujer con los nervios de punta, que, en vista de ser descubierta, empieza a darse cuenta de la verdadera dimensión de su aventura. Narrada en un lenguaje sencillo, con una fluidez y un estilo que me han sorprendido, el autor logra meternos en la piel de la protagonista, sintiendo la angustia de verse descubierta y quien se encuentra ante la disyuntiva de negar la culpa o reconocer lo que ha hecho, aceptar el castigo y esperar ser perdonada.

El ritmo no decae, el suspenso está presente en cada una de sus páginas, hasta llegar al final, el cual sorprenderá a más de uno.

Y gracias a la habilidad del autor, además de Irene, tendremos al Miedo, como uno de los personajes principales de esta obra.

“El miedo es peor que el castigo, porque éste es algo determinado y, por severo que sea, no se puede comparar con el temor que despierta en nosotros lo incierto, una tensión espantosa, que no conoce limite”.

Una lectura que, sin lugar a duda, hará reflexionar sobre las consecuencias de cometer una infidelidad.

Si gustas de historias que te mantengan en tensión desde la primera página y con un final que sorprende, este libro es para ti.

Espero muchos se animen a leer y disfrutar de tan buena lectura.

¡Un beso a todos! 😘💙🌻📚